Hospital de Avicena

Localización

Bobigny, France

Año de construcción

1931-1935

Arquitectos y artistas

Azéma Léon (1888-1978), Mantout Maurice (1886-1953)

Fotografías contemporáneas

Historia

El proyecto de edificación, en París, de un hospital destinado a enfermos de confesión musulmana originarios del Magreb data de mediados de los años veinte. Responde a una política de creación de servicios llamados de “vigilancia y asistencia a los norteafricanos de paso o residentes en París”, una manifestación de la voluntad de los poderes públicos de acompañar a los varones musulmanes originarios de Marruecos, Argelia y Túnez residentes en la metrópoli y, más concretamente, en la región parisina.

Este proyecto de hospital sigue a la construcción de la gran mezquita de París, inaugurada en 1926[1]. Lanzado por Amédée Laffont un profesor de medicina de la Facultad de Argel, es retomado muy pronto por la Ciudad de París, aprobado por el consejo municipal en 1929 y luego por el departamento del Sena, para ser aprobado al año siguiente por el Consejo general. El proyecto fue impulsado por Pierre Godin[2],antiguo funcionario en Argelia, concejal de París en los años veinte y fundador, en 1925, del Servicio de vigilancia y protección de los norafricanos.

Dado que el Servicio de arquitectura y paseos de la ciudad de París estaba a cargo del monopolio de la edificación pública parisina, se encarga la realización del hospital a León Azéma, arquitecto jefe de la ciudad, quien colabora con Maurice Mantout, uno de los autores de la gran mezquita de París.

La elección del terreno no resultó fácil porque se contemplaron varios posibles emplazamientos, tanto en París como en sus alrededores, resultando elegido el municipio popular de Bobigny cuyos responsables se mostraron muy hostiles al proyecto.

Se construye entre 1931 y 1935[3], y su gestión corre a cargo de la región del Sena hasta 1961, fecha en la cual fue adscrito a la Asistencia Pública de los hospitales de París. Denominado hospital franco-musulmán en el momento de su creación, pasa a ser Hospital Avicenne, en 1979, tomando su nombre del famoso médico y filósofo persa del siglo X. Su construcción ha sido objeto de artículos tanto en revistas de arquitectura como generales.

Su organización puede calificarse de clásica para un hospital de tamaño medio, que recuerda al de establecimientos construidos en la misma época, como, por ejemplo, el hospital marítimo de Lorient (1932-1936). Una entrada monumental, con un porche que le otorga prestancia, precede un edificio tripartito así como varios edificios anexos dispuestos en el gran parque que rodea el hospital: una morgue, una sala de calderas con los espacios técnicos necesarios para su funcionamiento (hangar, garaje, lavandería) y un laboratorio. El proyecto original tenía un carácter más morisco, sobre todo en el edificio administrativo, que presenta frisos de azulejos vidriados y ventanas arqueadas en todos los niveles. Una entrada monumental, con un porche que le otorga prestancia, precede un edificio tripartito así como varios edificios anexos dispuestos en el gran parque que rodea el hospital: una morgue, una sala de calderas con los espacios técnicos necesarios para su funcionamiento (hangar, garaje, lavandería) y un laboratorio. De líneas muy sobrias, el conjunto es de estilo Art Déco. En los años de 1960, los tejados añadidos a los pabellones alteraron el carácter modernista del conjunto.

Tres elementos rompen esta coherencia y aportan un matiz orientalista al edificio. El pórtico, la fachada principal del cuerpo central del edificio y la morgue. El pórtico se inspira de la puerta monumental de Meknes, la Bâb Mansûr al-‘Ilj, construida en el siglo XVIII[4]. Se accede por un ancho arco apuntado, enmarcado por dos bastiones de planta cuadrada abiertos en tres de sus lados por un arco de herradura sostenido por pilares achaflanados. La fachada tripartita está decorada con un mosaico geométrico que incluye una inscripción dorada sobre fondo azul en la que figura el nombre del hospital en francés y en árabe. El fondo está decorado por una discreta pila de frisos policromados que evocan el motivo de la sebka de la Alhambra de forma muy simplificada. En el edificio central, un tramo de escalones (destruido en 2005) permitía acceder al edificio cuya fachada se articula en dos niveles mediante una galería de arcos apuntados. Finalmente, la parte pública de la morgue presenta una planta centralizada que se abre hacia el exterior por una galería de arcos apuntados. La cubierta cupulada evoca la arquitectura balnearia medieval magrebí. Esta misma planta se repite en el oratorio[5] construido unos años después en el cementerio musulmán en la misma ciudad de Bobigny en 1934.

En 2006, el arco y los dos pabellones de entrada del hospital, las fachadas, la entrada y la sala del consejo del edificio central (Dominique Larrey) así como el pórtico y la mezquita del cementerio musulmán fueron inscritos en el suplemento al inventario de monumentos históricos.
Hoy en día, el hospital se ha convertido en uno de los símbolos del patrimonio local frecuentemente representado en postales.

Notas

Mapa

Qué dice la gente

Transcripción en francés

Transcripción en inglés

Transcripción en español

Sobre este sonido

El personal y los visitantes del hospital nos cuentan sus impresiones mientras se preparan para cruzar el pórtico de entrada, en el que se lee “Hôpital franco-musulman” en francés y árabe.

Entrevistas y redacción

Juliette Hueber, Claudine Piaton, Hamid Rahiche, Bulle Tuil Leonetti

Edición

Éléonore Clovis

Mezcla de sonido

Alban Lejeune, It Sounds Good

Música

Licencia

CC-BY-NC-SA

Temas asociados

Actividades educativas